Por: Arushi, miembro de Maven

Una de cada cuatro. Esa es la estadística que encontré por casualidad durante mi residencia como médico de cuidados intensivos pulmonares en un centro médico académico de Chicago. Si bien la infertilidad afecta aproximadamente a una de cada ocho mujeres en la población general, la tasa entre los médicos es de una de cada cuatro.

En el mundo de la medicina, nuestra formación es incesante. Nos consume desde los veinte años hasta los treinta. Rara vez hablamos de planificación familiar y fertilidad. Pero incluso siendo una joven médica centrada en mi carrera, me di cuenta de que no quería posponer más este capítulo de mi vida. Sabía que si mi esposo, Ankur, y yo esperábamos a terminar mi formación, estaría empezando mi camino hacia la familia a mediados de mis treinta. Intentar concebir en la cima de mi carrera fue, como mínimo, abrumador. Pero estoy muy contenta de habernos lanzado, porque el proceso fue mucho más largo y desafiante de lo que esperaba.

La fertilidad es un proceso lleno de desafíos emocionales, físicos y, a veces, financieros, y mi experiencia como médica me ayudó a comprender mejor las complejidades de este tema. Como médica, me sorprendió la complejidad del sistema de salud, incluso cuando tenía la ventaja de comprenderlo desde dentro. Mis profesionales fueron y son fantásticos, pero las apretadas agendas de mis médicos nos dejaban a mí y a mi esposo con preguntas sin respuesta. A veces sentía que mis médicos dictaban mi atención sin comunicarse plenamente conmigo. Me sentía frágil y vulnerable durante la FIV, y anhelaba esa atención personalizada.

Durante este tiempo, mi esposo investigó a fondo su oferta de beneficios y me presentó Maven, una plataforma que resultó ser invaluable durante nuestro proceso de fertilidad. Maven, a la que mi esposo tiene acceso a través de su empleador, facilitó mucho el proceso, brindándonos acceso a endocrinólogos reproductivos (ERI) que estaban disponibles en cuestión de horas. ¡Horas! Nos reunimos con el Dr. Salem, y nuestra conversación nos brindó a mi esposo y a mí las respuestas y la tranquilidad que necesitábamos desesperadamente.

Fue muy difícil contactar con médicos... Maven fue genial porque buscamos: "¿Alguien puede responder nuestras preguntas?" y había muchísimos endocrinólogos reproductivos a nuestra disposición. Pensamos: "Podemos conseguir una cita y hablar con alguien en seis horas".

Como profesional médica, su comunicación me impresionó mucho; causó un gran impacto en una conversación tan breve. A través de la aplicación Maven, vi al Dr. Salem muchas veces durante el proceso de FIV. Agradecí no tener que ver a un médico nuevo cada vez, y el Dr. Salem estuvo disponible casi siempre que quisimos verlo. Esta continuidad en la atención me ayudó a sentirme más tranquila.

Mi experiencia con Maven no solo me afectó personalmente, sino que también influyó en la forma en que atiendo a mis pacientes. El apoyo rápido y receptivo que recibí durante mi proceso de FIV me hizo profundamente consciente de la importancia de la comunicación oportuna en la atención médica. Esperar incluso unas pocas horas por una respuesta puede ser una tortura para los pacientes, y ahora estoy más al tanto de sus necesidades e inquietudes.

“Siento que ha cambiado la forma en que atiendo a mis pacientes, porque soy mucho más receptiva a cómo se pueden sentir después de haber pasado yo misma por [el proceso]”.

Ahora soy mamá de Avyaan, un precioso bebé de siete meses. Pronto empezará a gatear. Pero nuestra experiencia en salud reproductiva no terminó con el parto. El posparto y los primeros días de la maternidad presentaron otra brecha en la atención. Mi ginecólogo-obstetra y mi pediatra tenían agendas muy apretadas. Maven nos brindó apoyo una vez más, ofreciéndonos una gran cantidad de recursos e información sobre temas como la lactancia materna, la crianza de los hijos y más.

Hace poco, empezamos a ver a una coach de sueño de Maven. Avi se despertaba todos los días a las 4 de la mañana y no volvía a dormirse. Se resistía a las siestas. Estaba perdiendo la cabeza: sentía que me pasaba la mitad del día intentando que dejara de llorar y se durmiera. En resumen, necesitábamos volver a entrenarlo para dormir. La coach de sueño de Maven nos ayudó a crear un horario de sueño. Pero, aún más valioso, le enviábamos notas a través de la app de Maven entre citas. Sentíamos que nos acompañaba en todo momento, y estoy muy agradecida de que nos acompañara en ese proceso. Poder volver a contactar con la misma coach y recibir orientación entre citas es una de las verdaderas ventajas de Maven.

Maven me resultó útil, ya que tengo muchos recursos. No me imagino lo útil que puede ser para alguien que no conoce tan bien el sistema sanitario.

Me apasiona compartir mi historia y promover conversaciones abiertas sobre fertilidad y planificación familiar, especialmente en el ámbito médico, así como más recursos para navegar por el sistema de salud y el proceso de FIV. Mi camino hacia la paternidad resalta el profundo impacto que Maven puede tener en las personas que necesitan apoyo para afrontar las complejidades de su proceso de atención médica. La accesibilidad, la puntualidad y la calidad de la atención son inigualables en el sistema de salud actual.

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