Fertilidad en el mundo: cómo apoyar a una población global de empleados

Existen muchos obstáculos que pueden dificultar la formación de una familia: la infertilidad inexplicable, la falta de acceso a tratamientos de fertilidad, la discriminación legal y las barreras económicas pueden dificultar la concepción. Estos problemas no son exclusivos de Estados Unidos; en todo el mundo, a menudo hay personas con dificultades para acceder y pagar costosos tratamientos de fertilidad. Incluso en países con sistemas nacionales de salud, la financiación de los tratamientos de fertilidad puede ser esporádica y estar sujeta a amplias estipulaciones, excluyendo a menudo a parejas LGBTQIA+ o familias monoparentales por decisión propia.

Las empresas reconocen la importancia de brindar apoyo para la fertilidad a sus empleados, pero para las empresas globales, este apoyo debe extenderse a quienes viven y trabajan fuera de Estados Unidos. Las soluciones de fertilidad que solo abordan las necesidades de los empleados estadounidenses no son verdaderamente equitativas, y sin acceso global al apoyo para la formación familiar , los empleadores corren el riesgo de que los empleados internacionales se sientan ignorados e infravalorados. A continuación, se presenta lo que los empleadores deben saber sobre el panorama de la fertilidad en Canadá, el Reino Unido, Irlanda, Nueva Zelanda, Australia e India, así como lo que pueden hacer para garantizar la paridad global en prestaciones de fertilidad .

Apoyando la fertilidad en todo el mundo

Canadá

A pesar de ofrecer atención médica universal, la mayoría de los canadienses no tienen cobertura cuando buscan tratamientos de fertilidad asistida (TRA), incluida la fertilización in vitro (FIV). La cobertura del tratamiento solo existe en cuatro provincias y no cubre adecuadamente el costo total del tratamiento de fertilidad. Esta falta de cobertura obliga a muchos canadienses a cubrir la mayoría o la totalidad de sus tratamientos de su propio bolsillo, lo que puede costar hasta $20,000 CAD por un tratamiento de FIV.

Quienes viven en alguna de las provincias (Ontario, Manitoba, Nuevo Brunswick y Quebec) que ofrecen algún tipo de financiación o créditos fiscales para tratamientos de fertilidad, aún enfrentan restricciones de edad y límites en el número de ciclos cubiertos, lo que puede reducir aún más la probabilidad de recibir apoyo financiero del gobierno. Ontario, por ejemplo, solo cubre un ciclo de FIV de por vida para pacientes menores de 43 años.

Como resultado de estas restricciones, gran parte del impulso recae en los empleadores para cubrir las carencias en la atención de fertilidad en el país. Las empresas con empleados canadienses pueden ofrecer mayor apoyo financiero a las personas que buscan tratamientos de fertilidad, con menos restricciones de edad y número de sesiones. Ofrecer acceso virtual a endocrinólogos reproductivos y otros especialistas en fertilidad también puede empoderar a los empleados para que tomen las mejores decisiones reproductivas según su salud física y sus limitaciones económicas.

Reino Unido

El Servicio Nacional de Salud (NHS) del Reino Unido cubre tratamientos de fertilidad para personas que los buscan, y el número de tratamientos cubiertos varía según la edad. Sin embargo, los municipios locales controlan la administración de esta cobertura, lo que significa que los criterios para determinar quién puede recibir el tratamiento varían drásticamente entre regiones. Por ejemplo, las directrices indican que la FIV debería estar disponible para las personas hasta los 42 años, pero una investigación de la BBC reveló que el 80 % de las zonas del Reino Unido no ofrecen tratamiento hasta esa edad límite. De manera similar, mientras que el NHS sugiere la cobertura de hasta tres ciclos de FIV, algunos municipios ofrecen solo un ciclo, mientras que otros solo cubren el tratamiento en “circunstancias excepcionales”.

Además, estudios han hallado desigualdades en la cobertura de fertilidad del NHS: en comparación con las mujeres blancas, las mujeres negras tienen peores resultados del tratamiento y reciben menos rondas de FIV. Las personas LGBTQIA+ también sufren discriminación: hasta julio de 2022, las parejas del mismo sexo formadas por dos personas con género femenino al nacer debían someterse a seis rondas de IIU (inseminación pagadas directamente de su bolsillo antes de poder recibir financiación para la FIV.

Las empresas con empleados en el Reino Unido pueden desempeñar un papel importante en la reducción de algunas de las desigualdades existentes en la cobertura actual del NHS. La atención de fertilidad, con un enfoque culturalmente accesible, conecta a los empleados del Reino Unido con proveedores con antecedentes y experiencias similares, garantizando que las personas negras y LGBTQIA+ reciban el mismo nivel de apoyo que sus contrapartes blancas. Asimismo, las empresas pueden proporcionar apoyo financiero adicional mediante reembolsos para la atención de fertilidad, ampliando así la cobertura más allá de los límites del NHS.

Irlanda

Actualmente, Irlanda es el único país de la Unión Europea que no ofrece financiación estatal para tratamientos de fertilidad. Si bien el Ministro de Salud anunció en abril de 2022 que se financiarán los tratamientos de FIV a partir de 2023, no está claro cuánta cobertura tendrán ni cuáles serán los criterios de elegibilidad. Tampoco es la primera vez que el gobierno anuncia que comenzará a ofrecer financiación; el gobierno se comprometió inicialmente a cubrir los tratamientos de infertilidad en 2019, pero la declaración no derivó en financiación.

Mientras el país espera mayor claridad sobre la financiación estatal, los irlandeses que buscan tratamientos de fertilidad aún pagan todo de su bolsillo. Una sesión de FIV puede costar entre 4.000 y 6.500 €, y la inyección intracitoplasmática de espermatozoides (ICSI), comúnmente utilizada para tratar la infertilidad masculina, puede superar los 5.000 €.

En un país con tanta incertidumbre en torno al financiamiento nacional de la FIV, los reembolsos de fertilidad patrocinados por el empleador pueden brindar a los empleados oportunidades de formar sus familias que de otro modo no serían accesibles económicamente.

Nueva Zelanda y Australia

Nueva Zelanda ofrece financiación pública para tratamientos de FIV, pero para poder optar a ella, las personas deben cumplir una larga lista de criterios , incluido un diagnóstico de infertilidad, que a menudo impide que las mujeres lesbianas accedan a la atención. Es probable que a las parejas con infertilidad inexplicable (es decir, que no se deba a afecciones diagnosticables como la endometriosis, por ejemplo) se les niegue la financiación pública. El gobierno neozelandés estima que 45 % de las solicitudes de tratamientos financiados con fondos públicos fueron denegadas debido a la infertilidad inexplicable.

La financiación australiana funciona mediante un sistema de reembolsos, donde las personas con seguro médico público pueden recibir cobertura para parte de su tratamiento de fertilidad, así como parte del costo de las pruebas genéticas . Sin embargo, a menudo no cubren servicios relacionados, como la recolección de óvulos, lo que significa que las personas pueden tener gastos de bolsillo significativos o tener que recurrir a un seguro privado para obtener cobertura adicional.

Proporcionar recursos financieros a los empleados australianos y neozelandeses para compensar las carencias en la atención médica puede tener un gran impacto en su camino hacia la familia. Las empresas también pueden ofrecer consultas virtuales con especialistas en fertilidad y endocrinólogos reproductivos, así como contenido clínicamente verificado, para empoderar a los empleados a tomar las riendas de su camino hacia la fertilidad.

India

Al igual que los estadounidenses, las personas de la India suelen tener una cobertura limitada, o inexistente, para tratamientos de fertilidad a través de la atención médica nacional o patrocinada por sus empleadores. Además, abunda la desinformación sobre la fertilidad en el país, ya que el 97 % de las mujeres de la India cree que el historial de consumo de pastillas anticonceptivas está asociado con la infertilidad.

Si las personas deciden buscar un tratamiento de fertilidad, a menudo tienen que explorar clínicas no reguladas para encontrar aquellas que ofrezcan servicios de alta calidad. El crecimiento de las clínicas de TRA en India es uno de los más altos del mundo, gracias en parte al turismo médico. Hasta finales de 2021, las clínicas no estaban reguladas ni supervisadas por el gobierno, lo que generó inquietudes médicas y legales. Si bien la regulación aumentó con la aprobación del Proyecto de Ley de Regulación de la Tecnología de Reproducción Asistida , encontrar una clínica de fertilidad con buena reputación puede ser a menudo un proceso abrumador.

A medida que las empresas buscan apoyar a sus empleados indios en sus procesos de fertilidad, brindarles acceso a una red de clínicas de fertilidad verificadas puede ser beneficioso. Para quienes buscan comprender mejor su fertilidad, las consultas virtuales con especialistas indios en fertilidad, así como el acceso a contenido clínicamente verificado, son una forma eficaz de combatir la desinformación y garantizar que los empleados se sientan empoderados en sus procesos de fertilidad.

Cómo Maven ayuda a apoyar a los empleados globales

Maven es la plataforma digital líder a nivel mundial en salud reproductiva y familiar. Ayuda a las empresas a brindar apoyo integral y de alta calidad a sus empleados en todo el mundo durante su etapa de paternidad y maternidad. Nuestro modelo de atención integral ofrece apoyo integral para la fertilidad mediante equipos de atención personalizados, apoyo especializado en la atención y programas de gestión de la atención basados en la evidencia para ayudar a mejorar los resultados de sus empleados.

Para saber más sobre cómo Maven apoyó a una miembro del Reino Unido en su proceso de fertilidad, lea la historia de Catherine . Y para ver la plataforma global de Maven en acción, contáctenos para programar una demostración hoy mismo.

Español